La Escuela Infantil de Butarque es un equipamiento que figura desde hace años en todos los planes y programas del actual equipo de gobierno municipal, y que, sin embargo, se demora año tras año. Desde el Ayuntamiento de Madrid ya se advertía en el año 2009 que la infraestructura se encontraba en fase de proyecto. Sin embargo, en un nuevo escrito en respuesta a las demandas de AVIB, desde el Servicio de Gestión Presupuestaria Participada se advierte que la adecuación del proyecto no se realizará, al menos, hasta 2012. Desde la entrega de las viviendas de Nuevo Rosales, hace más de diez años, son más de un millar las niñas y niños que han pasado a la etapa de educación primaria sin que en el barrio de Butarque hayan tenido la oportunidad de acceder a una escuela infantil pública, circunstancia que al Ayuntamiento de Madrid parece importarle bien poco cuando ha estado destinando ingentes cantidades de dinero a infraestructuras de dudosa rentabilidad social, y dilatando la construcción de un equipamiento que debería haber sido uno de los primeros en levantarse en el barrio. El negocio, principio de la acción municipal A pesar de que Butarque es un barrio joven, habitado mayoritariamente por parejas emancipadas, y con una de las natalidades más altas de la ciudad, el primer equipamiento “público” con el que pudimos contar fue una Residencia para Mayores y Centro de Día que gestiona el grupo de empresas “Adavir” con un concierto al 35% con la Comunidad de Madrid. Para expandir el negocio de las empresas, fondos de capital de riesgo, cajas y bancos que forman este grupo, no hubo problemas de suelo, de proyecto, de financiación ni de acuerdos entre administraciones. Para que doten a un barrio con uno de los mayores índices de natalidad de toda la ciudad de una escuela infantil, habrá que esperar a que los niños y niñas que nacen en el barrio vayan a la Universidad. Desde AVIB condenamos el abandono al que, tanto Ayuntamiento como Comunidad de Madrid, están sometiendo a nuestro barrio. Llevamos muchos años esperando la construcción de la escuela infantil, de los colegios necesarios y del instituto del que carecemos, y las soluciones siempre son tardías y chapuceras. Exigimos el cumplimiento inmediato de los compromisos para que nuestros hijos puedan contar con unos equipamientos educativos dignos en el barrio. 
