Si algo ha dejado claro la situación provocada por la pandemia es que es fundamental contar con una sanitaria pública de calidad y suficiente para reaccionar a situaciones de especial emergencia, y la atención primaria se ha demostrado vital para hacer de barrera de contención frente al colapso hospitalario. No se puede seguir tolerando que barrios enteros, como el nuestro, carezcan de este equipamiento tan importante.
Lo mismo ocurre con los centros educativos. La Comunidad de Madrid tiene un serio problema el próximo curso si se quiere poner algún tipo de medida de distanciamiento en los colegios e institutos. Multitud de barrios carecen de centros suficientes, muchos están masificados, otros tantos en obras víctimas de la políticas de construcción por fases. En Butarque lo sabemos muy bien y ahora nos enfrentamos a la incertidumbre de no saber en qué condiciones van a dar clase nuestr@s hij@s el curso que viene.
Pero lo peor de todo es que las primeras comunicaciones que hemos tenido con la Consejería de Sanidad y Educación nos hacen ser muy poco optimistas respecto a los compromisos que teníamos.
En teoría antes del mes de junio se debería haber firmado el convenio de cesión de la parcela del futuro instituto entre el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, pero esta cesión todavía no se ha producido. El proyecto debería estar realizado entre junio y septiembre, según los plazos que nos dieron en la reunión del 4 de marzo en la Viceconsejería de Organización Educativa, la misma que ahora no da señales de vida cuando les preguntamos cómo va el trabajo de redacción.
La Consejería de Sanidad sí que nos ha contestado, pero para decir que debido a la crisis sanitarias han paralizado todas las licitaciones que tenían pendientes, por lo que el centro de salud de Butarque tampoco se comenzará a construir este año.
Mucho nos tememos que la crisis provocada por la COVID va a servir de excusa para retrasar una vez más estos dos equipamientos. Ya sucedió lo mismo hace una década, cuando la crisis económica se utilizó para paralizar las construcciones de equipamientos en los barrios.
MANIFESTACIÓN EL MARTES 23 CUMPLIENDO LAS MEDIDAS DE SEGURIDAD
Por todo esto hemos decidido alzar la voz para decir que no estamos dispuestos a padecer las consecuencias de la situación que ha provocado la pandemia. Al contrario, exigimos que se nos dote de estos equipamientos para poder afrontar de la mejor manera posibles posibles futuras situaciones similares.
Y para retomar las movilizaciones hemos decidido convocar una manifestación por el barrio cumpliendo con las medidas de seguridad. Será el próximo martes 23 de junio, a las 19:30 horas saliendo desde las pistas de patinaje de la Plaza de los Metales (junto a la parcela del futuro centro de salud) y terminando en la puerta del IES Juan Ramón Jiménez. Para asistir será obligatorio llevar mascarilla y respetar la distancia de seguridad que establezca el decreto de nueva normalidad que estará en vigor ese día.
PARAGUAS PARA DISTANCIARNOS Y PARA REIVINDICAR
Con el objetivo de garantizar la distancia de seguridad, hemos pensado en que todo el mundo acuda con un paraguas decorado con algún mensaje en defensa de la sanidad y la educación en el barrio. De esta manera tendremos un acto vistoso a la vez que seguro. También os animamos a pintar vuestra mascarilla con algún lema.
Nuestro barrio no puede esperar más, ya está bien de tantos años de promesas incumplidas y de soluciones chapuceras. Necesitamos un centro de salud y un instituto y para lograrlo no tendremos más remedio que, una vez más, reivindicarlo en la calle hasta que sean una realidad.