Es muy difícil entenderse con alguien que no habla tu idioma, porque por más que expliques algo, te siguen mirando como las vacas al tren. Esto es lo que nos ocurre cuando discutimos con la Junta Municipal de Villaverde sobre la gestión de las actividades culturales del distrito. Nos pasó con la Cabalgata. La Junta no entendía que no nos pareciera bien que la hubieran recuperado y que destinaran 120.000 euros para hacer un desfile que a su juicio era el mejor que se había organizado nunca. Se lo dijimos muy claro. No nos parecía bien que se privatizara una actividad que podían hacerla las entidades vecinales por mucho menos dinero y con más participación. Destinar ese dineral a una actividad que con colaboración entre Ayuntamiento y entidades hubiera resultado igual de bien por muchísimo menos dinero, no tiene sentido teniendo en cuenta las necesidades y problemas de Villaverde. Pero no lo entendieron, se enfadaron porque nos oponíamos a su decisión y nos acusaban de estar siempre a la contra. Ya vimos el resultado de la privatización y de la gestión de la Junta, el concurso resultó desierto y tuvimos que ser las entidades ciudadanas las que organizaran la cabalgata en escasos 15 días Pero el resultado no fue suficiente. Llega Carnaval y volvemos a encontrarnos con la misma situación. La Junta ha destinado 59 mil euros en un contrato para participar en las actividades que otros años organizaban las asociaciones del distrito. Pero no lo hace hablando con las entidades y viendo la manera de colaborar directamente, sino que se lo encarga a una empresa privada que se beneficia de algo que las entidades sin ánimo de lucro llevan años organizando. Entonces se lo decimos, les explicamos que hay alternativas a las privatizaciones de los servicios, que no todo tiene que pasar por la externalización de la gestión. Pero ellos alegan que no hay opción, que tiene que ser así, y que si queremos fondos que pidamos subvenciones. No comprenden que lo que queremos no es que nos subvencionen, sino que entre la administración y las asociaciones haya mecanismos de colaboración que culminen con las mismas actividades que tenían planteadas, pero sin que una empresa privada saque beneficio a costa de los impuestos de todos, y que ese dinero que se ahorran se dedique a cuestiones sociales. Les dijimos que el distrito propone escasa cultura, y la poca que tenemos siempre a través de privatizaciones. Es cierto que ellos se quitan responsabilidades organizativas, de seguridad y ante posibles complicaciones, se lavan las manos. Pero esa no puede ser la política en unos tiempos donde cada céntimo que sale de las arcas públicas es tan necesario para cubrir las enormes desigualdades que existen. Pero no lo entienden, o no lo quieren entender. Si hemos pedido para Carnaval hacer talleres y nos ponen una empresa que las hace, ¿por qué nos oponemos? Y de ahí no salen. Hemos dudado hasta el final sobre qué hacer con las actividades que la empresa que ha ganado el concurso tiene que hacer. En principio dijimos que no queríamos saber nada, que las organizaran donde quisieran, pero no en el mismo sitio donde nosotros íbamos a hacer la fiesta de Carnaval. Pero de esta forma el dinero se hubiera ido a la basura del todo y la empresa sacaría su beneficio sin que la gente aprovechara lo que ya se ha gastado. Así que finalmente intentaremos hablar con la empresa y aprovechar de alguna manera lo que ya está adjudicado con dinero de todos. Pero dejamos claro, una vez más, que existe otra forma de hacer las cosas. Más participativa, más barata y sin que nadie se beneficie por ello económicamente. Os esperamos el domingo a las 12 en el parque de los cumpleaños. 
