Descontento vecinal por la subasta de vivienda pública en la calle de Berrocal

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El Ayuntamiento continúa adelante con el proceso de privatización de promociones construidas por la EMVS (Empresa Municipal de Vivienda y Suelo) en régimen de alqui- ler y de alquiler con opción a compra. Los vecinos de los números 52 y 56 de la calle de Berrocal, con 276 viviendas, en el barrio de Nuevo Rosales, temían que les pasara lo mismo que a residentes de otros distritos de la capital en meses anteriores. Sus sospechas se confirmaron cuando el 14 de marzo se levantaron con una carta en su buzón que les informaba del inicio del proceso de enajenación mediante subasta de sus viviendas firmada por la directora de gestión de Vivienda y Patrimonio, Estrella Sánchez. El plazo de recepción de ofertas finaliza el 14 de abril. Desde ese mismo momento, los residentes decidieron pasar a la acción contra lo que consideran un abuso por parte de la administración municipal. Pancartas en fachadas con mensajes como Gallardón, especulador o Gallardón hace el negocio a sus amigos, la creación del blog verona203afectados.blogspot.com, el intento fallido de implicar al defensor del Pueblo y el próximo paso en estudio, llevar el tema a los tribunales “porque pensamos que hay un vacío legal en este proceso”; dice Iván Arellano, vecino del número 52 de Berrocal. “Lo que más me duele es que encima nos lo hayan comunicado a través de una carta, ni siquiera en una reunión. Hay que hacer las cosas bien, pero lo claro es que el Ayuntamiento necesita liquidez”, critica Pablo Álvárez, del portal 56. “Lo que no es de recibo -continúa- es que quieran financiar grandes obras como el Palacio de Cibeles a costa de miles de familias”. Los contratos de ambas promociones expiran en fechas diferentes. Los del número 52, dentro de tres años y los del 56, dentro de cinco. A partir de ahí, los vecinos dicen que no saben qué va a pasar con sus casas. “Nos sentimos engañados, porque hemos invertido mucho dinero en tener nuestra vivienda y no sabemos qué va a pasar”, concluyen. Este periódico ha intentado conocer la versión del Ayuntamiento de Madrid sin conseguirlo al cierre de la presente edición.