Os recordamos que el domingo 16 de marzo, las AMPAS y Asociaciones de Vecinos del barrio han convocado una manifestación a Sol para exigir a la Consejería de Educación la construcción inmediata del Instituto Público de Butarque. A raíz de las recientes movilizaciones en el barrio, la Consejería de Educación de Lucía Figar se ha encontrado ante incómodas preguntas en medios de comunicación sobre el Instituto de Butarque, en las que se informaba que el propio presidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González tenía constancia del problema (ver el artículo de El Mundo del 13 de febrero ‘Clases ’de prestado’ en Butarque’ y en el mismo periódico el 28 de febrero ‘300 vecinos toman el solar donde estaba previsto un instituto’). Ante estas informaciones, la Consejería se ha visto forzada a tranquilizar a madres, padres, vecinas y vecinos y ahora nos comunica una oferta de 12 aulas, un par de laboratorios y una promesa indeterminada de una segunda fase que aún no está escrita. Por supuesto, esta nueva información no va acompañada de comunicado oficial alguno y con la credibilidad de quien en su día prometió el Instituto de Butarque para el curso 2011-2012. Si en esta ocasión no se trata de un nuevo engaño, lo cierto es que el próximo curso los alumnos de la ESO seguirán en instalaciones del Ausiàs March, donde no los mantienen más tiempo porque sencillamente ya no hay espacio, y para el curso 2015/16 esos mismos alumnos no tendrán a su disposición un Instituto de Secundaria y Bachillerato completo, sino el número exacto de aulas que necesitan y ni una más. La promesa de finalizar el edificio para el curso siguiente en una segunda y última fase se hace difícil de creer cuando tenemos la experiencia de los dos colegios del barrio levantados en tres fases, haciendo caso omiso del trastorno ocasionado a los niños, y cuando hemos sido testigos de numerosos compromisos respecto al instituto que ellos mismos han incumplido sin dar explicaciones. Estos antecedentes sumados a la falta de un proyecto que defina qué Instituto tienen pensado hacer, a cuántos alumnos va a acoger, de qué módulos de Bachillerato dispondrá, qué partida presupuestaria tendrá asignada,… e incluyendo los cambios de planes, de un día para otro, sobre el mejor solar para edificarlo, sólo puede significar que no tienen ningún proyecto, ni sobre la mesa, ni sobre la cabeza, que continuarán resolviendo los problemas a trompicones y que siguen pensando que nuestros hijos no son dignos de esa educación de calidad a la que tienen derecho. Los padres no podemos quedarnos tranquilos sin tener la seguridad de que, llegado el momento, nuestros hijos tendrán plaza para ser escolarizados. De momento las noticias de la consejería no nos aseguran nada porque no nos explican nada. No debemos conformarnos ni parar en nuestro empeño por ver el instituto terminado por muchas razones, la principal, porque nos encontramos casi finalizando el primer trimestre de 2014 y ni siquiera tienen claro de dónde van a sacar la partida presupuestaria para poder realizarlo. La única evidencia que tenemos es que les molesta que su nombre esté en boca de los medios asociado a las críticas y las protestas, por eso responden con caramelos para enmudecernos, para mantenernos contentos y, sobre todo, silenciosos. Y por eso es importante que el domingo 16 de marzo acudamos todos, vestidos de amarillo, a la Puerta del Sol para hacerle saber a la Consejería que no nos valen los parches, que queremos un instituto completo y que sólo nos mantendremos callados cuando éste sea una realidad. Os animamos a que os suméis a la movilización y que le déis la máxima difusión posible al cartel que os adjuntamos tanto en vuestros mensajes por redes sociales, vecin@s, porque ahora más que nunca, está en juego el futuro de nuestros hijos e hijas.