Tras más de diez años de espera, cinco muertos y múltiples atropellos las obras proyectadas en la Avenida de los Rosales, la vía principal del barrio de Butarque, en Villaverde, inquietan a sus vecinas y vecinos, al no solucionar la mayor parte de problemas denunciados desde hace ya, demasiados años. Las obras, declaradas de interés general en el año 2001, se están ejecutando a partir del tercer proyecto que se redacta desde entonces. Cada nuevo proyecto ha servido para recortar paulatinamente el cumplimiento de las demandas vecinales iniciales. El presupuesto inicial de más de 4 millones de euros, adjudicado hace 8 años, se ha visto recortado hasta 2,5 millones, de los cuales la gran parte van a parar a la ejecución de una estación de bombeo de agua, que no sería necesaria de haberse ejecutado la obra en su momento. A la vista de lo ya ejecutado, sin tener en cuenta anteriores acuerdos con el movimiento vecinal, las obras están consistiendo en: – Levantar aceras en buen estado y reconstruirlas casi al completo con el mismo diseño inicial. – Ejecutar una costosa estación de bombeo cuya necesidad surge por haber construido previamente un colector a una cota superior a la del saneamiento de la Avenida. La obra de reforma de la Avenida ha quedado en un lavado de cara que se olvida de los siguientes puntos: – En el tramo norte de la Avenida, ni se acondiciona ni se habilita el paso para vehículos y peatones al cruzar la línea de FFCC., como estaba previsto y proyectado. – No se ejecutan las salidas y entradas de la A4 al barrio, como estaba previsto y proyectado. – En el tramo sur, no se ejecuta el paso bajo la A4, como estaba previsto y proyectado. – No se abordan los problemas de tráfico actuales y futuros, ante los nuevos desarrollos urbanísticos de Villaverde y Getafe: ni se desdoblan los carriles, como estaba previsto y proyectado, ni se buscan alternativas. – No se ha buscado solución a los problemas de aparcamiento: el ordenamiento de las plazas previstas, se presenta descompensado ante la realidad del parque automovilístico de vecinos y vecinas.
Un lavado de cara muy caro
Al desgraciado y más importante coste humano sufrido, el coste económico de los proyectos hace preguntarse a vecinos y vecinas ¿Quien asumirá la responsabilidad en la gestión actual y pasada en torno a la Avenida de los Rosales? Coincidiendo con el acceso de Esperanza Aguirre a la presidencia de la Comunidad de Madrid en 2003, se pagaron 300.000 euros como indemnización a la adjudicataria por no haber ejecutado la reforma inicial proyectada. Hoy, 7 años más tarde, la mayor parte del montante actual (2.578.744,54 euros) se destinará al bombeo de agua que inunda la Avenida cada vez que llueve. Unas inundaciones que son provocadas por los problemas derivados de haber ejecutado un colector de aguas para las obras de Madrid Calle 30, en una cota superior a la de la Avenida. Es decir, no sólo se ha recortado el presupuesto inicial, sino que gran parte de este se destina a subsanar un terrible error de cálculo en los colectores municipales, que podría haber sido corregido sin coste alguno en su momento.
Un lavado de cara muy oscuro
La Consejería de Transporte e Infraestructuras, que mantuvo reuniones con AVIB y otros colectivos vecinales, a través de su viceconsejero Luis Armada, prometió que se realizaría un seguimiento exhaustivo de los trámites previos al comienzo de los trabajos, facilitando el proyecto de ejecución, cosa que la Consejería no ha hecho. Es más, aún en su página web se puede leer la nota de prensa de julio de 2007, donde anuncia el comienzo de la reforma de la Avenida, con titulares como “la Comunidad duplicará y acondicionará la Avenida de los Rosales en dos kilómetros” o “los trabajos incluyen la construcción de plazas de aparcamiento y la conversión de esta vía en calle”. Desde la Junta de Distrito y desde la Consejería de Transportes, se ha ocultado y dificultado de manera reiterada, el acceso por parte de vecinos y vecinas al completo y modificado proyecto de la presunta reforma de la Avenida de los Rosales. Otros datos derivados, de los cambios introducidos en el proyecto, generan más preguntas entre vecinos y vecinas: – ¿Existe relación entre el cambio realizado en el proyecto definitivo (relativo a la eliminación de los desdoblamientos de carriles) con la paralización de la planta de reciclaje de escombros, en el límite sur de la Avenida de los Rosales, ubicada en Villaverde y limítrofe con Perales del Río? – ¿Cómo es que Joaquín Mª Martínez, concejal-presidente del distrito de Villaverde, confirmó en un pleno de noviembre de 2008, que no existía inconveniente alguno por parte de Patrimonio Verde para dar el permiso relativo a los árboles afectados, cuando este es el argumento esgrimido para recortar y replantear el proyecto?
¿Una presentación a bombo y platillo?
Ahora los vecinos y vecinas de la Avenida, disponen de panfletos publicitarios de la Comunidad de Madrid en sus buzones y escuchan en los medios de comunicación, las bondades de la presunta reforma. La campaña publicitaria oficial pretende vender una reforma de la Avenida que no es tal: lo único que se está haciendo es levantar y volver a pavimentar aceras y ejecutar una estación de bombeo de agua que no sería necesaria de haber ejecutado los colectores municipales a su cota correspondiente hace escasos años. Sin embargo, no se abordan ninguno de los problemas estructurales de la avenida: tráfico, aparcamiento, movilidad y seguridad peatonal e incomunicación con el resto de barrio de Villaverde por los pasos bajo los puentes de FF.CC. Y quizá, lo peor de todo, es que este lavado de cara comprometerá en un futuro una verdadera reforma de la Avenida, que no obstante desde AVIB seguiremos exigiendo hasta verla hecha realidad.